Luces de marcha atrás del automóvil
Cualquier circuito de luces participa de las condiciones que allà expusimos en lo que se refiere a su protección con fusibles, la posible presencia de relés, los cables y las lámparas. Los circuitos de luces de marcha atrás, asà como los de niebla y proyectores adicionales de largo alcance (de los que nos ocupamos seguidamente) están dentro de los mismos condicionantes. Por el momento vamos a referirnos, en este apartado, a las luces de marcha atrás (Fig. 78).
Las luces de marcha atrás o de retroceso deben encenderse siempre que el conductor coloca en el cambio de marchas la palanca en posición de marcha atrás, independientemente si es de noche (en cuyo caso son de especial utilidad si el vehÃculo ha de hacer maniobras) como de dÃa, para aviso de los demás usuarios de la vÃa. La integración de un equipo de luces de marcha atrás en la instalación de un automóvil la podemos ver en la figura 79. La misma palanca de cambios dispone de un contactor que cuando el conductor la coloca en la posición de marcha atrás, se conecta automáticamente.
En el esquema de la figura 79 tenemos este contactor señalado con el número 1. Como ocurre en la gran mayorÃa de diseños de estos accesorios, la corriente la recibe desde el cajetÃn de interconexión del habitáculo (2) a través del fusible de protección (3). Luego pasa por el cableado hasta los conectores (4) desde donde alimenta las lámparas de marcha atrás (5) dándoles masa a través del portalámparas o bien de la estrella de masa más próxima (6).
Como puede verse, este circuito es muy sencillo y de hecho, además de las lámparas que pueden fundirse con relativa facilidad cuando superan determinadas horas de uso, la parte más delicada es la del contactor. Sin embargo, es un circuito bastante seguro que no suele crear problemas. Como ocurre con todos los circuitos de este tipo, la investigación de las averÃas debe llevarse a cabo comenzando por el estado del fusible de protección. Si el fusible está en buenas condiciones, revisar el estado de las lámparas.
Si las lámparas no están fundidas, la averÃa hay que buscarla en el mismo contactor. Con un multÃmetro será conveniente ver si recibe corriente y si establece el contacto cuando está accionado. También una mala masa o un cable interrumpido pueden ser causa de averÃas de este tipo, por lo demás, repetimos, poco frecuentes.
Califica este Artículo:
Deja un comentario