Las bisagras del automóvil

Las bisagras son las piezas que hacen posible el giro de las puertas. Por lo tanto, son piezas de gran importancia para que las puertas ajusten correctamente en relación con las planchas vecinas del marco. En la figura 26 se puede ver un despiezo de una bisagra sencilla perteneciente a una carrocería de la marca Ford, y su relación con las planchas vecinas de la puerta (1) y del montante delantero (2). Como se puede observar, la bisagra consta de dos hojas (3 y 4) y la articulación se logra gracias a la presencia del pasador en cuyo extremo superior se halla un tapón. El montante delantero dispone de una placa de bisagra soldada a la estructura. Aquí se ajustan dos tornillos, sujetos por medio de tuercas, mediante los cuales se puede variar la posición de la puerta en relación a la bisagra.

La forma de actuar para llevar a cabo el ajuste de una puerta a través del juego de las bisagras es la siguiente. En primer lugar, se aflojan las tuercas de fijación (9) hasta que la puerta comienza a tomar juego. Se cierra entonces la puerta y se comprueba que su asentamiento sea el requerido en toda su periferia respecto al marco del vano. Como quiera que se han aflojado los tornillos de la bisagra, la puerta tendrá tendencia a caer, por lo que se le pueden poner cuñas de madera que la asientan correctamente con relación al marco. Cuando esto se haya logrado, se procede a apretar provisionalmente los tornillos o tuercas de posición de la bisagra.

Acto seguido se debe proceder a abrir la puerta y a cerrarla de nuevo para comprobar si su encaje sobre el marco es correcto. Si es así, ya se puede pasar a apretar los tornillos de las bisagras. Pero si en el proceso se observa que la puerta no queda armónicamente encajada en el marco, hay que volver a realizar la operación hasta conseguir su perfecto ajuste. Cuando una puerta se descuelga mucho y su cierre se observa que es muy deficiente, se ha de proceder a realizar el trabajo que se acaba de describir. Pero ocurre también muchas veces en el taller que la diferencia es muy pequeña a pesar de lo cual la puerta se cierra con dificultad. En estos casos podemos forzarla algo cogiéndola por un extremo y tirando de ella hacia arriba, de la manera que nos muestra la figura 27. A continuación se comprueba el buen cierre de la puerta y, si éste es bueno, se pasa a apretar los tornillos de la bisagra.

A veces puede ocurrir que las bisagras se hayan desgastado o, sencillamente, que se hayan agrietado. En este caso es lógico que la puerta no se sostenga con la debida naturalidad por más pruebas que se le hagan. No habrá más remedio que pasar a sustituir las bisagras o la pieza de ellas que sea defectuosa. Para sustituir las bisagras debe comenzarse por el desmontaje de la puerta sacando el pasador de la bisagra. La hoja de la bisagra que va sujeta a la puerta suele estar soldada por puntos y debe retirarse tras haber fresado dichos puntos. En cuanto a la otra hoja, sujeta al pilar o montante delantero, suele ir fijada por medio de tornillos que pueden desmontarse, no sin ciertas dificultades muchas veces, con la ayuda de un destornillador de golpe.

El montaje de la nueva bisagra requiere algunos cuidados, pues al ir una de sus hojas soldada conviene no cometer errores al elegir su correcta posición ya que ello comportaría serios problemas de ajuste de la puerta con respecto al marco. Por lo tanto, conviene primero conocer con exactitud el lugar donde se va a soldar por puntos que puede ser no coincida exactamente con los lugares ocupados por los puntos de soldadura de la anterior hoja. En algunas carrocerías se puede tomar el punto exacto de esta posición a base de montar la puerta en su vano y calzarla con cuñas de madera hasta alcanzar la posición correcta con respecto a las rendijas que quedan en el marco del vano de la puerta. Luego, a través de la plancha del pilar delantero, en el que se debe anclar la bisagra, se puede ver la posición correcta que deberá ocupar la bisagra que va adosada a la plancha de la puerta, e incluso se puede marcar esta posición por medio de una herramienta especial que no es más que un botador acodado. En otros casos este marcaje hay que hacerlo con la puerta ligeramente abierta, lo que comporta una mayor dificultad y un mayor riesgo de error.

Una vez acertado el lugar de anclaje se pasa a efectuar la soldadura por puntos. Insistimos una vez más en el hecho de que pequeños errores en la colocación de la hoja de la bisagra que va soldada a la plancha de la puerta se pueden rectificar por medio de la modificación de la hoja que va atornillada a la estructura del pilar. A veces se puede recurrir a ovalizar ligeramente los orificios de paso de los tornillos para ganar con ello unas décimas de milímetro que se traducen después en varios milímetros en el extremo opuesto de la puerta, para conseguir un centrado más preciso en caso de pequeñas desviaciones en la soldadura por puntos de la hoja anclada en la puerta.

El trabajo se suele completar con una soldadura de latón, con un cordón por toda la periferia de la hoja de la bisagra que se une a la plancha de la puerta para proporcionarle mayor rigidez.
Las bisagras no sólo las encontramos en las puertas sino también en los capós, especialmente en el delantero, aunque adquiriendo, en este caso, una forma bastante particular como la mostrada en la figura 28. Las dos tuercas (T) unen el capó a una de las caras de la bisagra.

En este caso el desmontaje es bastante sencillo y consiste en sacar las tuercas de fijación. En algunos casos será también necesario sacar la rejilla de aireación de material plástico para poder desmontar totalmente la bisagra y acceder a la fijación de la segunda cara anclada a la plancha. Este desmontaje no debe ofrecer problemas, aunque en muchas ocasiones es necesaria la colaboración de dos personas para que la gran pieza de revestimiento que es el capó no se desplome y llegue a ocasionar daños a la pintura de otras partes de la carrocería. En cuanto a las bisagras de los portones cabe decir que siguen el mismo diseño que las de las puertas y la forma de actuar con ellas es, pues, muy parecida por lo que no vamos a extendernos de nuevo sobre este tema.




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