Escuadra hidráulica

La otra gran herramienta hidráulica para el enderezado de la plancha y de la estructura es, sin duda, la escuadra. Ahora vamos a ser breves en la descripción de las posibilidades de trabajo de esta herramienta hidráulica.

Una forma de actuar con la escuadra hidráulica puede verse en una serie de figuras que vamos a comentar a continuación. En la primera de ellas, la figura 65, vemos el momento del anclaje del tope deslizante en el extremo del brazo horizontal en una parte sólida de la estructura de la carrocería. A continuación se procede al amarre de la cadena solidaria del brazo vertical o palanca de la escuadra en la zona accidentada o parte que se trata de enderezar, que es la operación que se está procediendo a hacer en la figura 66. Aquí es necesario cuidar con gran atención la buena y segura disposición de los amarres para que no se puedan soldar durante el tensado con el consiguiente peligro del que ya hablamos cuando nos referimos a esta herramienta.

Una vez asegurado el amarre se pasa al tensado progresivo del brazo vertical y con él de la cadena. Cuando ésta comience a quedar bien tensa comprobar que el amarre no cede y ya se puede proceder a dar bombeo al mecanismo hidráulico tal como se puede ver en la figura 67, iniciándose ya el enderezado de la plancha. En la figura 68 tenemos finalmente otro ejemplo de la utilización de la escuadra para mantener tensada la plancha, momento que utiliza el operario para proceder a los trabajos de aplanado, con un tas y un martillo. Posteriormente una mayor aplicación de fuerza a la escuadra, ayudada por el trabajo del operario servirá para conseguir que la plancha se vaya enderezando hasta obtener la forma original.

Salvo casos especiales en los que se encuentra en el mercado material de recambio para un determinado modelo, un trabajo como el que hemos descrito de enderezado de una aleta de guardabarros se suele realizar con el cambio de la pieza de revestimiento. Por ello la escuadra suele ser indispensable para el enderezado de la plancha en partes de la estructura de la carrocería y, sobre todo, para trabajar con ella en combinación con la bancada; pero no obstante, quedan también destacadas sus posibilidades de todo tipo para ayudarnos en el enderezado de grandes superficies de chapa.

Al igual que en el gato hidráulico también en la escuadra se han de buscar y encontrar los anclajes en el sentido contrario a la causa que originó la deformación, es decir, de forma contraria al golpe. En ningún caso es conveniente que caigamos en la tentación de desplazar el punto de apoyo que consideramos correcto por el hecho de que este punto sea débil y no pueda hacerse cargo del soporte de reacción de la escuadra. Cierto que en muchos casos podemos encontrarnos con la dificultad añadida de que no haya ningún punto sólido que le sirva de soporte. En este caso el operario ha de saber que hay útiles que vienen con la escuadra para hacer posible obtener de forma artificial estos puntos sólidos de apoyo. Consisten en dos pinzas (podemos verlas en A de la Fig. 69) y una barra (B) las cuales trabajan en colaboración con unos cabezales especiales (C). Las pinzas pueden aplicarse en la parte baja de la talonera, de la forma que muestra la figura, atornilladas a la pestaña.

Cuando es conveniente repartir el esfuerzo por una superficie amplia se debe acudir a utilizar tacos de madera a los que incluso se les puede dar forma con una escofina para que se adapten correctamente a la pieza que se trata de enderezar y se apliquen convenientemente en toda su superficie. A este respecto tenemos, en la figura 70, un nuevo ejemplo de la utilización de una escuadra para el enderezado de un pilar central. El golpe fue recibido en la parte baja entre el estribo y el montante pero la ayuda del taco de madera (T) mantendrá la forma del pilar al enderezar, además de protegerlo de deformaciones debidas a la gran fuerza con la que la cadena acciona.

Otro ejemplo de utilización también se aprecia en la figura 71, en este caso tratándose de enderezar el estribo que se halla deformado a consecuencia del golpe. Aquí es interesante observar, en los dibujos de detalle de la parte derecha de la figura, las pinzas de sujeción de las cadenas. Antes de proceder a realizar algunos de los trabajos descritos anteriormente, es conveniente y necesario el disponer de algún tipo de manual que nos oriente en la reparación y nos permita preparar el proceso a seguir. En la actualidad son muchos los canales de información que nos facilitan la labor; en la mayoría de los casos es el propio manual del fabricante el que nos permite seguir por medio de signos y símbolos cada uno de los pasos del trabajo a realizar con la herramienta más idónea de una manera clara y ordenada. En las figuras 72 y 73 se pueden ver algunas de las formas utilizadas por dos importantes fabricantes: Renault y Fiat.

En el caso del fabricante italiano, vemos el modo gráfico de representación de un trabajo de reparación (sustitución de un larguero estribo rueda), en el que se ilustran algunos de los procesos de trabajo en los que intervienen en la reparación.

• Figura 74: En este apartado se indica la sección de la chapa en los puntos más significativos para poder ver y así regular la posición y profundidad del corte para no dañar las chapas que están debajo. También el pictograma nos indica la utilización de una sierra neumática para llevar a cabo el corte.
• Figura 75: Aquí se nos indica que tenemos que quitar los puntos de soldadura del perímetro del borde de la carrocería con una fresa de puntos. A continuación quitar los restos de los puntos de soldadura con esmeriladora de disco y finalmente aplicar un promotor de adhesión epoxídico, pintura galvanizante o un producto equivalente en las zonas afectadas por el esmerilado.
• Figura 76: Ajustaremos el recambio y acabado de los bordes de la carrocería, lo colocaremos en su alojamiento después de desbastarlo y lo fijaremos por medio de la pinza autoblocante. Trazaremos el perfil del recambio sobre la carrocería, quitaremos el recambio y cortaremos los perfiles sobrantes.
• Figura 77: Prepararemos el recambio y controlaremos el posicionamiento correcto sobre la carrocería. Realizaremos orificios en el borde inferior del recambio, quitaremos con una esmeriladora todo el tratamiento exterior y aplicaremos pintura electrogalvanizante en los bordes en contacto de la carrocería. Fijaremos el recambio mediante pinzas autoblocantes y montaremos la puerta controlando la uniformidad de la holgura.
• Figura 78: Ahora nos toca realizar la soldadura del recambio por medio de puntos en los bordes superiores e inferiores del larguero estribo puerta a la carrocería y rellenaremos los orificios por medio de soldadura MIG.
• Figura 79: Corregiremos la deformación de la chapa con un tas y un martillo y eliminaremos los restos de soldadura por medio de una esmeriladora de disco.
• Figura 80: Finalmente, aplicaremos un tratamiento de protección electroforesis en las zonas afectadas por la soldadura. Sellaremos las uniones mediante un sellador acrílico transparente y seguiremos con el ciclo de pintura y de aplicación de productos cerosos en el interior del larguero.